Estoy deseosa de mi machito. Voy a su casa con cositas. Nada más llegar lo besó loca de amor. Me lo llevo a la habitación, le quito la ropa y le pongo un corsé y una minifalda. El se deja hacer y a mi me excita verlo de travesti. Meto mi cabeza debajo de la falda, traviesa y devoro su hermoso falo hasta que llena mi boca con su leche. Me quito las bragas, lubrico bien mi coñito y me siento en cuclillas en uno de mis juguetes. Mi mariquita se excita y me espatarra boca abajo, en el suelo y me folla brutalmente, haciéndome gemir de dolor y placer, me rompe, me desgarra, despacio, muy profundo, luego más rápido. Se para sobre mí, no quiere acabar y yo tampoco. Le pido que me abrace, y lo hace con ternura besuqueandome la nuca. Bombeo mis entrañas abrazando ese tierno y amado nabo. Mi macho me coge por la cintura y vuelve a la carga, me somete como a la perra que soy y acaba su loca carrera. Le suplico que aguante dentro y uso mis trucos anales. Finalmente sale de mí dejándome vacía con el coño muy dilatado y rezumando semen. Me tumbo en la cama, sobre mi machito. Beso sus pechitos de hombre, lengueteo y chupo sus pezones que se endurecen. La pongo a cuatro patas y lamo su rajita mientras ordeño su nabo. Lubrico bien y le sodomizo con un consolador. Él sintiendose penetrado se rinde lleno de deseo, se tumba y me deja trabajar a dos manos. Una trabajando su culo y la otra su verga. Mi hombrecito gime como una mujercita, y yo beso sus abiertas nalgas. Le meto profundo el consolador y me tumbo sobre él. Restregando mis pechos por su espalda. Se da la vuelta y yo me siento a horcajadas penetrada por mi hermoso mariquita. Se corre como una loca con el culo lleno y su pollón dentro de mí. Me deja todo el coño inundado. Joder que zorra soy.