Lo invité a subir a casa, Vestía con un niki negro ceñido y un pantalón vaquero estaba muy sexy!
Nada más pasar la puerta de entrada le acorrale contra la pared y me abalancé a sus labios, realmente deseaba fundirme en ellos, que nuestras lenguas jugaran sin control, con pasión, deseo y mucho morbo.
Estaba cachonda, mis manos le acariciaron empezando por su cara y terminando en su bragueta del vaquero, donde me entretuve acariciando por encima del pantalón hasta que mi mano desabrocho, y se coló bajo sus slips, con delicadeza tomé su polla que con tal torpeza por mi asombro no la podía coger, no era cualquier polla, mis fantasías fluían por mi cabeza e intentaba ocultar mi cara de ello, al final pude coger su gran polla con mi pequeña mano para disponerme a hacerle una paja pero mi boca la deseaba, la quería devorar entera así que me arrodillé ante el para comerle su gran polla, la deseaba tanto que fue grandioso sentirle disfrutar de tal manera que el ritmo de mis embestidas iban en aumento para así poder intentar que entrase entera en mi boca.
Me gustaba ese primer contacto, la comí con gran deseo, la saboreé, mi lengua juguetona le encantó rodearla, humedecerla, algo mordisco con delicadeza, mis manos acompañaron a mi boca en esa felación, el éxtasis llego hasta que su leche corría por mi boca, llegamos juntos al cielo.
Me tendió su mano para facilitarme mi incorporación, dispuse de su ayuda y al subir del suelo fue agradable ver su cara de placer.
Nos abrazamos durante unos segundos largos con tal intensidad que es explosivo, nuestro labios se funden en un delicioso y apasionado beso que nos hace vibrar.
El me sorprende apoyándome contra la pared y me da la vuelta, me susurra al oído (como me pones de cachondo), acompañado con su lengua que juega con mi ovulo y recorre parte de mi cuello. Siento como su mano se cuela en mi pantalón apartando mi tanga, sin tregua alguna. Estaba completamente húmeda, sus dedos se cuelan con tal facilidad q pierdo el control y le suplico que no pare.Con la otra mano juega con mi pecho, sube los dedos hacia mi boca y así los humedece , susurrándome al oído (me gusta como me comes la polla)Y buffff yo me vengo explotando en un éxtasis de placer.
Lo que me hizo sentir es imposible de explicar, no hay palabras exactas para describir tal sensación que me llevo al cielo de placer. Ese fue nuestro segundo de muchos encuentros.
Desde ese momento soy suya y el es mío.
