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La señora Yenny mi sirvienta

6:15 am Sunday, 16th May, 2021

Hola tengo un relato 100% real que quisiera compartir con todos.
Esto sucedió cuando estaba en la universidad y tenía unos 22 años, cuando aún vivía con mis padres. A mi casa iba tres veces a la semana una señora de nombre Yeneny a hacer aseo, la señora de unos 45 años, blanca de cabello negro, no tenía el mejor cuerpo pero estaba bien para su edad, tenía una cola grande y unos senos grandes y hermosos.
Yo siempre llegaba a mi casa pasadas las 3 de la tarde. Un día tuve la suerte de salir antes de medio día porque el profesor se enfermó y tuvo que ser incapacitado por varios días. Cuando llegué a la casa me dirigí al baño del segundo piso. Pensé que no había nadie puesto que no se escuchaba ningún ruido. Cuando estaba por entrar al baño la veo de espaldas e inclinada limpiando la pared y solo tenía puesta su ropa interior que no era para nada sexy. Me quedé parado mirándole la cola que se le veía muy provocativa en esa posición. Estuve mirándola por unos 30 segundos hasta que ella se dio cuenta y sentí mucha vergüenza. Le pedí disculpas y me fui al otro baño. Al rato ella se acercó a mi habitación a decirme que le tocó quitarse la ropa por qué derramó el blanqueador sobre su ropa y tuvo que lavarla inmediatamente para no dañarla, todo quedó así por unos días.


Ella siempre evitaba tener contacto conmigo, hasta un día que me acerqué a ella y le pregunté que si le pasaba algo. Me dijo que tenía mucha vergüenza desde ese día, a lo que le dije que no se preocupara que todo había sido accidental, que antes me disculpara a mi por quedarme mirándola. Solamente sonrío y al ver que no le había molestado le dije que tenía muy buena cola. Volvió a sonreír y me pidió que no le dijera eso por qué la avergonzaba más. Note que no le molesto para nada, ni que la viera ni los comentarios que le hice. Decidí decirle en broma que la próxima vez esperaba verla en hilo, soltó una carcajada y me dijo que era muy atrevido. Los días posteriores seguí haciéndole comentarios y adulándola de lo que había visto y ella no se molestaba.
A la semana siguiente otra vez salí temprano y con mucha prisa me fui para mi casa. Iba con la idea que otra vez la vería en ropa interior pero al ingresar a la casa ella estaba en la cocina, lo que me decepciono bastante, por qué estaba vestida con un short y una blusa. Me saludó y me preguntó qué como me había ido. Le respondí que en la universidad bien pero que al llegar a la casa esperaba encontrarla en tanga. Se sonrió y me dio la espalda. Me quedé un rato observándola y diciéndole que me gustaba mucho su cola hasta que me dijo que si se había puesto el hilo pero que le daba vergüenza que la viera así. Inmediatamente sentí nervios y excitación. Le rogué que me dejara ver cómo le quedaba y me respondía que no. Le insistí varias veces a lo que siempre respondía que le daba mucha vergüenza. Me atreví a acercarme y le pase muy suavemente mi mano por su espalda hasta llegar a la cola. No respondió nada entonces metí mi mano entre su short, alcance a tocar un pequeño hilo, me excitó aún más, tanto que tuve una erección casi inmediata. Comencé a bajar su short, lentamente hasta dejar al descubierto esa gran cola. Empecé a escuchar como su respiración se hacía cada vez más fuerte y agitada. Ella seguía sin voltearse y yo seguía admirando esa delicia de cola. Me alejé un poco para verla un poco mejor. Se veía espectacular. Ella se volteó y alcance a ver por encima de su blusa que sus pezones se habían puesto duros y se habían parado. Me preguntó qué si le había gustado, le respondí que muchísimo, que me había excitado demasiado a lo que ella respondió que también quería que le mostrara algo. Le pregunté qué que quería ver, me dijo que me bajara el jean, me desabroche el jean sin dejar de mirarla. Vi en su cara las ganas que ella tenía. Cuando le mostré mi pene que a decir verdad no pasa de los 18 centicentímetros, vi como humedecía sus labios con la lengua, le pregunté que si le gustaba y solamente respondió diciendo "uuuffff". Me le acerqué de nuevo y le dije que si lo quería tocar. Lo agarró con delicadeza y me empezó a masturbar muy lentamente. Me dijo que desde que se separó de su esposo (hacía más de 5 años) no había tocado ningún pene. Empecé a tocar sus senos por encima de la blusa. Sentía sus pezones duros y parados. Subí su blusa y los empecé a lamer... ella comenzó a retorcerse y a gemir y me dijo que me detuviera. No le hice caso y seguí chupándolos y apretándolos fuerte y notaba que cada vez se excitaba más.
Baje mi mano a tocar su vagina estaba un poco velluda y mi sorpresa fue total, estaba hecha una laguna, estaba demasiado mojada. Hice su tanga a un lado, empecé a mover mis dedos sobre su clítoris y ella cada vez gemía más fuerte. Nos dimos un beso muyyyyyyy apasionado. Le quité totalmente el short, la tomé de la mano y le dije que fuéramos a mi habitación.
Nos dirigimos al segundo piso, la empecé a besar y así entramos en la habitación. La acosté, me monté encima de ella y comencé a bajar besando su cuerpo. Besé sus senos un rato, luego baje a su abdomen y seguí bajando hasta su vagina. Hice la tanga a un lado y comencé a lamerla. Apretaba mi cabeza para que no me despegara. Le hice sexo oral por un buen rato y hubo un momento en que decidí lamer su ano. Su gemido fue muy fuerte, tanto que me asustó pero me di cuenta que le encantaba que hiciera eso y así seguí por unos cuantos minutos. Me pedía que siguiera y que no parara, hasta que llegó a su primer orgasmo. Fue maravilloso escucharla, sentir cómo se movía y como le gustaba lo que yo estaba haciendo. Me levanté para besarla pero inmediatamente comenzó a chupar mi pene. Lo hacía con tantas ganas que se notaba que llevaba muchos años sin tener un pene para ella. Estaba desesperada, lo metía todo en su boca. Se acostó y me pidió que se lo metiera. Empecé a buscar un condón pero me dijo que quería hacerlo así, que además ella no iba a quedar embarazada. Empecé a meterlo en su vagina muy lentamente, aún recuerdo su cara cuando iba entrando, era demasiado excitante. Estuve un rato encima de ella. Escucharla era lo mejor en ese momento, luego ella se puso encima de mí y por dios... ver sus senos como se movían. Me pedía que se los chupara. Comenzó a moverse cada vez más rápido y a gemir más fuerte hasta que tuvo otro orgasmo. Un rato después de estar así me dijo que quería que terminara en su boca, pero yo no iba a dejar pasar la oportunidad de tenerla en 4. Se lo pedí y sin pensarlo se bajó y paro ese gran culo que a decir verdad se veía muy rico en esa posición. Empecé a lamer su ano otra vez por un rato, gemía delicioso la tome por la cintura y se lo metí fuerte. Dió un grito y empecé a meterlo cada vez más fuerte. Gemía y gemía sin parar y me recordó que quería que terminara en su boca estuvimos así por un rato hasta que tuvo otro orgasmo. Esperé a que lo terminara y sentí que yo iba a terminar. Le puse mi pene en la boca y ella me lo chupo hasta que me hizo que me viniera. Se tragó hasta la ultima gota de semen y se acostó. Estábamos bañados en sudor. Yo estaba feliz, no podía creer que lo había hecho con Yenny. Empezó a hablarme de tanto tiempo que llevaba sin tener sexo y que nunca hubiese pensado que lo iba a hacer conmigo, que la verdad nunca me había visto con ojos de sexo. Me dio un beso y se levantó de la cama. Ya era tarde y mis papás estaban por regresar a la casa.
Después de eso lo hicimos muchas veces y cada vez fue mejor, en un próximo relato si desean les contaré cuando tuvimos sexo anal.



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El morbo es mi pasión y el sexo mi fuerte


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