En una sexta mañana de un cuarto día de verano un segundo plasmo un amor de un primer encuentro lastima que al séptimo día todo se confundió, y hasta el octavo no lo supere,pero en el sexto lo sabía todo. Ya la segunda semana había pasado y al tercer día todo cambio. El que entendió esto sabe interpretar bien lo que trato de expresar en mi corazón.