4:53 pm Thursday, 20th June, 2019
El arte de hablar sucio o “dirty talking” en la cama puede ser un arma de doble filo, pero si se utiliza correctamente es posible que marque el camino a todo un nuevo nivel de excitación.
Esta área dentro del mundo del sexo hace sentir a muchos indecisos, ansiosos y un tanto torpes ya que no están del todo seguros de cómo hacerlo sin ponerse en ridículo. Además juega un papel fundamental el hecho de conocer a la pareja y saber o intuir si este tipo de juego lingüístico puede resultarle excitante. Por eso siempre es imprescindible mantener una comunicación desinhibida de aquello que gusta o no.
“Háblame sucio”, esta frase puede hacer que muchos se queden tan fríos como un nudista sorprendido en una tormenta de nieve. Para otros funciona como un pistoletazo de salida.
¿Qué decir? ¿Qué quieren que les digas? ¿Y qué pasa si dices demasiado? O sin embargo, ¿si dices tan poco? Muchos se quedan demasiado tiempo anclados en la precaución de ser correctos, llevándolos a mantener conversaciones aburridas para nada destinadas a elevar las pulsaciones -- ya ni hablar de orgasmo. Por otro lado, los más desvergonzados y exagerados, apagan todo el erotismo de la escena.
El truco es pues llegar al límite pero sin cruzarlo… Por eso queremos darte unos consejos para que puedas llegar a disfrutar este fetiche lingüístico.
Práctica
La elección de las palabras importa. Y mucho. Nada de juramentos, ni palabras mal sonantes o cursiladas de novela rosa (“penétrame con tu espada de pasión”). No seas innecesariamente cínico o explícito: un hombre no se va a excitar si le hablas de la presión sanguínea en su miembro. Pero si puedes ser descriptivo. Los detalles hacen que las historias se vuelvan realidad, y básicamente, el lenguaje guarro contiene muchos detalles.
Con cuidado
No te limites, pero tampoco te extralimites. Es esencial entender que el dirty talking NO es una falta de respeto hacia la otra persona. Míralo como un juego y una manera excitante de probar tus dotes comunicativas. Si encuentras algo ofensivo o si tu amante lo hace, es importante HABLARLO.
Palabras clave
Aprende nuevas palabras --la ficción erótica es un buen lugar para obtener ideas que se puedan añadir a la situación. De todas maneras no te limites sólo a la verborrea obscena: frases tan simples como “te voy a hacer lo que quieras” pueden surtir el efecto deseado. De todas maneras, a continuación os dejamos una pequeña lista de frases que suelen surtir el efecto deseado, tanto en ellos como en ellas:
- ”Me voy a correr.”
- ”La tienes muy dura.”
- ”Fóllame duro.”
- ”Qué húmeda estás”
- ”Estoy súper cachondo”
- ”Quiero comerte todo”
- ”Dime cómo te gusta.”
- ”¿Volvemos a hacerlo otra vez?”
Prepárate
Cómo y cuándo lo hagas es importante. El sentido del humor es valioso, pero siempre de manera equilibrada. Si eres demasiado serio, puede crear un ambiente desconcertante. No empieces directamente con un lenguaje obsceno --espera a encontrar las señales y el momento oportuno para hacerlo. Nunca lo fuerces. Hazlo porque te sale hacerlo de manera natural o porque el momento así lo demanda. Lee las señales y observa cómo reacciona la otra persona a las palabras que estás utilizando. Y si la otra persona te da una señal negativa, para de inmediato!
Por otro lado, ofrecer una especia de guia del placer puede marcar la diferencia. Que tu amante te diga “Me encanta que me frotes los pezones” “Me encanta que me toques ahí…” puede ser un incentivo del dirty talking.
Los detalles importan…
Susúrrale en el oido… dile lo grande que es, que es la más grande que has visto, que la tiene muy dura --no tengas mieda de expresarte. Y cuando estés en el culmen de la pasión y encuentres una frase que realmente te pone mucho, no tengas miedo de repetirla para que de esta manera, aumente la intensidad sexual del momento. Incluso algo tan simple como “No pares” “¡Sigue!” ¡Sigue!” puede hacer que tu amante vaya más allá de su placer.
Fantasía
¿Siempre has querido hacer BDSM? ¿Te van lo lugares prohibidos? ¿Sientes curiosidad por intentar un trio? Susúrrale a tu pareja cómo, cuándo, dónde te gustaría hacerlo y por qué. Narrar este tipo de historias puede encender a más de uno ¡en segundos!
BONUS
El cómo lo hagas por supuesto va a influir en el momento. Un equilibrio de susurros bien modulados al oído o acompañados de gemidos y suspiros puede ser la combinación ganadora para dominar el lenguaje sucio.
Ahora es el momento de poner tu lengua a trabajar…
¿Te gusta el “dirty talking”? ¿Cuáles son tus expresiones favoritas? Compártelo con nosotros en los comentarios!