Fue hace 10 años cuando descubrí que sentía más placer cuando yo lo daba que cuando yo era el receptor.
Me encantaba volver loca de excitación a mí chica...le decía de todo al oído y siempre intentaba buscar juegos y diferentes situaciones para hacer de cada encuentro algo diferente. Le vendaba los ojos y me hacía pasar por algún chico que le gustaba en su trabajo, me dejaba atar para que ella hiciera lo que quisiera conmigo, aprovechaba cualquier momento escondido en la calle para hacerla saber que tenía un paquete para ella escondido en mis pantalones y a veces le hacía que pasar la mano para ponerla mala. En fin nuestra vida sexual era bastante excitante.
Pero lo q más me gustaba es que ella llegará al orgasmo antes que yo para dejarla bien satisfecha. Su postura preferida, ella encima de mi cabalgando como una loca, aunque a veces me hacía daño pero no me importaba si ella conseguía su orgasmo.
Me di cuenta que le estaba dando demasiado placer cuando ella quería y comencé a ser un juguete para ella y eso me gustaba.
Descubrí que me encanta el papel de sumiso y cumplir todo lo que ella quería que hiciera...me encanta que me utilicen, me encanta sentirme un esclavo o un sirviente.
Mi última fantasía es que me ordenen comerme un buen coño y que ni siquiera me dejen quitarme la ropa, en definitiva lo que más me gusta es ser vuestro juguete sexual.
