Temblorosa llegaste a la cita prevista. Vestida como te había indicado en los contactos previos.
Besos de rigor, donde ya notaste mi mano en tu culo apretando fuerte.
Pude notar que efectivamente no llevabas la ropa interior como te ordene.
Te cogi de la mano y nos fuimos a compras.
Dominante en busca de sumisosas dispuestos a entrega y placer hacia su dueño y señor