Nos habías pedido por activa y por pasiva un artículo con posturas para disfrutar de un trío entre dos hombres y una mujer. Hemos tardado un poco, es cierto, pero es que nos negábamos a las posturas típicas de las películas porno mainstream en las que en vez de ser ella el centro de atención, acaba haciendo un esfuerzo doble chupando y masturbando como si le fuera la vida en ello. El horror, el HORROOOOOR. Así que después de una tormenta de ideas (perversas todas), hemos decidido aconsejaros estas posturas en las que, aunque no haya ningún facesitting, la mujer es la reina. ¡Quizá en la próxima!
1. Juegos previos
¡Pues sí que empezamos bien! Tienes toda la razón, querida. A simple vista parece que es ella la que da placer a los dos hombres mientras «las ve venir», pero es que al ilustrador le dio un ataque de pudor y no quería dibujarla con las piernas abiertas mostrando su magnificencia, que es, precisamente, como te debes colocar tú. Lo ideal es abrirlas todo lo posible y apoyar las corvas en los muslos de tus amantes para que les resulte más fácil masturbarte mientras tú les masturbas a ellos.Pero, por favor, no os centréis en eso. Esta postura presenta infinitas posibilidades. Caricias, mordiscos, arañazos, besos… Si queréis que aún sea más morbosa, podéis poneros frente a un espejo para observar cómo os dais placer o probar una variante en la que la mujer se da la vuelta y se coloca frente a los dos hombres. Además de veros las caras, podréis cambiar el ángulo de las masturbaciones, besos y caricias.
2. Juegos previos y penetración
Esta postura es muy placentera para la mujer porque permite la penetración vaginal frontal y de lado (que estimula puntos erógenos de las paredes vaginales que no suelen estimularse con otras posturas), caricias por parte de los dos hombres y la masturbación a tres bandas. Además, el hombre que está detrás de ella puede besar y morder su nuca, cuello y hombros, y acariciar sus pechos hasta que llegue al orgasmo.
3. Uróboros
Esta postura es una variante de la que mostramos en nuestro reportaje sobre las ideales para jugar en trios MMH y a la que bauticé «Uróboros» porque me recordó a este símbolo que representa a una serpiente que se devora la cola, formando un círculo con su propio cuerpo, y que simboliza la unidad de todas las cosas, tanto espirituales como materiales. En ella, los amantes se tumban de lado formando un círculo para masturbarse, practicar sexo oral, beso negro, un nnoruego y/o penetrarse mutuamente con los dedos o juguetes. Hay que reconocer que para realizar esta variante se necesita la elasticidad de la Nadia Comaneci y la fuerza de Conan, por lo que si sois más bien sedentarios y de tirón muscular fácil, lo mejor es que os tumbéis de lado en la cama como en la original y os dejéis de esfuerzos épicos.
4. Doble penetración
Como os conté en el artículo en el que doy consejos para practicar la doble penetración, la postura sexual por excelencia para disfrutarla es la vaquera o andrómaco combinada con la del perrito. Esta postura no solo facilita la doble penetración (anal y vaginal, doble vaginal o doble anal), también proporciona mucho placer a la mujer (anal y Punto G) y les permite amplitud de movimientos tanto a ella como al hombre que la penetra por detrás. Además, trae dos bonus: este podrá darle azotes y también penetrarla anal o vaginalmente con un juguete sexual. Pero ya sabes, toda moneda tiene su cruz: por un lado, el que está tumbado bocarriba apenas puede moverse y por otro, ella deberá ir con cuidado para no fracturarle el pene.
