La mujer 10 en la disco...
Un viernes en la noche, estando en mi apartamento, solo y sin nada que hacer, me llama un amigo que estaba en la misma situación. ¿Viejo, que hay que hacer? y decidimos salir a tomar un par de cervezas a una discoteca que queda cerca a una universidad. Nos gusta el sitio por que es amplia, con mesas separadas y buena música.
Llegamos a eso de las 9 pm y pedimos la cerveza, realmente estaba un poco solo. Terminamos la cerveza y estábamos comentando en irnos de ahí por que no había mucha gente y así nos disponíamos a hacerlo cuando llegó un grupo de personas, mas o menos 11 o 12, entre mujeres y hombres, que después nos enteramos, estaban celebrando un cumpleaños.
Me llamó la atención una mujer de 32 a 37 años, muy bien vestida, muy elegante, con un porte de mujer de mundo. Muy interesante para mis 28 años de esa época. Con mi amigo empezamos a contar las mujeres y efectivamente sobraban un par, por lo cual nos dispusimos a pedir una cerveza más y mirar si se podía salir a bailar (A veces las mujeres no lo quieren y grave...).
Yo ya tenía fijada la mujer a la cual iba a invitar, así que me dispuse a esperar con cautela. No paso mucho tiempo, cuando salieron la mayoría a bailar y dejaron a mi presa sola, por lo cual me acerqué y delicadamente la invite que me acompañara a la pista a bailar... "espero no me digas que no ..." le dije, y ella un poco indecisa aceptó. La tome de la mano y la conduje a la pista.
Mientras bailábamos la primera canción la miraba y empecé con las preguntas que siempre se hacen: Se llamaba Yuli, casada, 35 años, un hijo y le fascinaba la música salsa (eureka, a mi me va muy bien en ese ritmo), con la suerte que una vez se terminó la canción, prosiguió una canción de salsa, por lo cual le dije que si por favor continuábamos, pues me gustaba mucho esa canción.
La señora aceptó (creo que se dio cuenta que no era malo para bailar) y empezamos a bailar. no niego que saque todo el repertorio que sabia sobre el ritmo y Yuli estaba encantada, por fin empezó a sonreír, la conversación se hizo mucho más fluida, me pregunto sobre mi y en una de las vueltas se le desajusto un botón de la blusa y apenas mire esos enormes senos, empecé con una erección.
Un poco apenado (no soy muy bueno con esas situaciones), le comente del incidente del botón, a lo que ella me suelta con toda picardía:
- Te gusta lo que alcanzaste a mirar? picarón....
No sabia que contestar, y le dije que a pesar de que me fascinaba lo correcto era avisarle y que ella me quite el placer de continuar observando.
- Ella suelta una gran sonrisa, procede a abotonarse nuevamente y a acercarse a mi oido y decirme que era un caballero y pummmm se acaba la canción.
Diablos.... estábamos en lo mejor y preciso se acaba. Ni formas, agradecí por la compañía y por el espectáculo adicional.... sonreímos los dos.
No le perdía vista de lo que hacía y observé que estaban tomando bastante, sin embargo con mi amigo continuábamos con cerveza, sin gastarla mucho porque apenas podíamos salíamos a bailar.
Nuevamente vi apropiado invitarla a bailar, y la invite, a lo que ella sin mediar palabra salió y empezamos a bailar pero muy unidos. Me hizo el reclamo de por que no la había sacado antes, que estaba muy aburrida, a lo cual yo interpelé que me daba pena con ella y con el resto de compañeros y me dice que no hay lio que podemos bailar toda la noche los dos y no hay problemas.
Cuando me lo dijo, sentí que ella quería algo más, así que empecé a atraerla hacia mi cuerpo y a hablarle cosas al oído lo más susurradas posibles y sentí como su pezones empezaron a ponerse duros. No me lo podía creer, una hembra de esas con migo?. Estaba deliciosa, vestía una blusa blanca, una falda negra, cabello lizo hasta la mitad de la espalda. Una diosa completa.
Al sentir eso empecé nuevamente una erección y en uno de los pasos de baile, la coloqué de espaldas hacia mi y le apegue todo mi miembro, para ver que hacía. Pues no le desagrado y todo lo contrario, apegaba mucho mas su enorme culo hacia mi. Quería sentir mi verga, y yo me sentía en el cielo. Los dos estábamos muy calientes.
Milagrosamente los compañeros de Yuli, se empezaron a despedir y a salir, solo quedaron otra chica y Yuli, por lo cual las invitamos a nuestra mesa. Ellas aceptaron y continuamos bailando y tomando.
Ahora ya sin el problema de los amigos, fui mas atrevido y empecé a acariciarle la espalda, a respirarle en el cuello, mas susurros y ella estaba encantada, no se separaba y como por arte de magia, empezamos a besarnos. Parecía que no había tenido sexo hace muchos años.... Besaba delicioso...
Nos fuimos a la mesa y continuamos con nuestros besos y ahí pude empezar a acariciarle las piernas, empecé a meter lentamente la mano y como pude llegue a su chochito que literalmente estaba chorreando y le hable al oído y le dije que por que estaba tan mojada.
Me contesto - tu me tienes así y hace mucho que no hacia esto.
Empecé a acariciarle ese coño, que estaba delicioso y ella pedía más, no demoró mucho cuando empezó a llegar, realmente fue muy delicioso. Terminó y se paró y se fue al baño. Realmente pensé que no volvería, pero a los 8 minutos mas o menos (aunque para mi parecía una eternidad), volvió, se sento a mi lado y me coloca en mis manos algo, y me susurra al oído:
-Te lo has ganado.
Con discreción miro que es y me entrega sus pantys todo mojados a lo cual lo guardo en mi bolsillo y me le acerco y le digo que si quiere algo mas pues estamos cerca de mi apartamento y que la podemos pasar mucho mejor. Sin mediar palabra, me toma de la mano y me saca de la discoteca, una vez afuera, me dice:
-Vamos, tengo 40 minutos para tí.
Yo vivía a 5 minutos a pie de ahí así que me dispuse a tomarla de la mano y conducirla hasta mi casa.
Vivo en un segundo piso por lo cual tomamos las escaleras, pero en el descanso la agarré y empecé a besarla y a meterle mano y tocarla por donde pudiera, estábamos muy calientes.
Llegamos al apartamento, abrí la hice pasar, cerré la puerta y ahí mismo la aprisione contra la puerta, le di la vuelta, le empecé a besar el cuello mientras mis manos tocaban sus tetas y la otra le subía un poco la falda. Estábamos como locos, ella tomaba mi pene por encima del jean.
De un momento a otro, le baje el cierre de la falda y con el la falda fue al piso, lo que me imaginaba, era una mujer 10. Tremendo culo el que tenía. Se dio la vuelta y me bajo los pantalones, mira hacia mi cara y me dice:
- La quería desde hace mucho rato en mi boca.
Y empezó con una mamada muy deliciosa, me toco pararla para no terminar ahí. Mi máxima es que siempre la dama tiene que llegar primero y satisfacerse.
La conduje al sofá de la sala y le quite la blusa. Realmente era la mujer 10, unas tetas grandes, con unas aureolas pequeñas y unos pezones apropiados para esas tetas y completamente erectos. Empecé a besarle el cuello, la boca, nuevamente el cuello, hacia como que me iba a meter los pezones en la boca y nuevamente al cuello, ella estaba completamente poseída. Al fin, empecé a meterme esas deliciosas tetas en mi boca y a succionar. Esa mujer era especial, con eso alcanzó el segundo orgasmo de la noche. Obviamente mis manos estaban mas turbándola mientras hacía eso.
Quiero tenerte dentro, me dijo.
Yo le dije que no, que aun faltaba mucho para que ella disfrutara de mi verga. Le levante las piernas y empecé a darle lengua en ese clítoris que lo tenia hinchado, delicioso y muy excitado. Apenas lo tocaba, ella respingaba de excitación. No demoró mucho cuando nuevamente otro orgasmo, esta vez, fue prolongado, fuerte, se quedo sin respiración y empezó a eyacular. Si señores, eyaculó, apenas miré eso me puse en posición y le metí toda la verga hasta el fondo. Era una vagina no muy abierta, obviamente no estaba apretadita, pero realmente estaba deliciosa. Ante mi embestida, dio un respingo adicional. Te dolió? le pregunte. Si pero es delicioso, me dijo. Sin mas, empecé a bombear mi verga y a darle duro y hasta el fondo. Yuli solo jadeaba y pedía mas mientras continuaba expulsando un líquido blanquecino.
Pedía mas y mas y eso estaba recibiendo, era tanta mi emoción de lo que había echo que en un empujón no aguante más y le llene de leche toda esa cuca y ella lo sintió y empezó a moverse mas y mas hasta exprimirme hasta la última gota. No voy a decir que fueron 20 posiciones, solo fue una pero el placer que sentimos, no se compara con nada.
Nos quedamos un momento quietos, jadeando, sin decir nada, ni hablar, solo recuperando el aliento. Al momento, sonó su celular, todo asustada, me separó y se apartó para hablar. No se que decía, yo estaba en otro mundo aún. Al momento llegó, me pidió el baño, le dije donde estaba. Se metió, un momento más y salió como habíamos llegado. Espectacular, la mujer elegante de la que me había fijado en la discoteca.
- Todo esto estuvo espectacular. Me dijo.
Yo le dije que cuando quiera, lo podíamos repetir con un poco mas de tiempo. (Realmente los 40 minutos que me dio se habían ido hace rato), me sonrió, intercambiamos números de celular, como pude me limpie y me vestí, la acompañé a donde estaba la compañera (era ella la que le estaba timbrando - me enteré después) y una vez echo esto, tomaron un taxi, nos despedimos, pero no para siempre, pues eso se repitió muchas veces más, veces que ya les estaré contando.
Una noche loca, una noche inolvidable, una noche que pintaba mal, pero que al final, como dice la canción : "La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida...."
