Primer encuentro y sesión al aire libre

1:37 am Tuesday, 5th October, 2021

Arturo987

Hola a todos, este relato es parte del entrenamiento de mi sumisa, el cual le dije que escribiera a partir de un encuentro que tuvimos hace unos días, ojalá les guste.




Nunca había estado más nerviosa por conocer a alguien en persona como lo estuve ese día, estaba tan emocionada preparé las cosas que me había pedido que llevara cómo tres días antes, la ropa la noche anterior, seguía sin creerlo no pensé que realmente sucedería pensé que sólo tendría una relación virtual con él, ya lo había aceptado y estaba conforme con eso, entre la pandemia y nuestras actividades creo que es complicado sin embargo ese día estaría relativamente cerca de mí trabajo por lo que era la ocasión perfecta para conocernos, la noche anterior por más que intentaba calmar tantas emociones dentro de mí me fue imposible, era un caos total tenía sentimientos encontrados, en momentos estaba extasiada de felicidad y emoción luego me desanimaba pensando que no me hiciera ilusiones que en cualquier momento podría cancelar, pero lo peor era pensar en verlo y que no quisiera usarme por no cumplir sus expectativas y eso me costó poder conciliar el sueño un rato.


En la mañana del día de nuestro primer encuentro desperté muy mojada muchísimo, no quería asearme para que mí Amo me viera más que escurriendo como la puta que soy, sin embargo, era necesario; temblaba al vestirme, la sensación de usar la ropa que me indicó mí Amo para encontrarme con él me encantó, es algo que hacemos regularmente, cuando salgo de casa él escoge mi vestimenta pero esta era una ocasión muy diferente, era vestirme para él y que me viera fue realmente emocionante, excitante y muy rico, sentía como me mojaba más y más, me dio mucha risa porque mí amo me dijo que eso pasaría.


Ya en el trayecto a realizar algunos quehaceres antes de verle me quedé pensando que no sabía cómo era posible confiar tanto en alguien sin conocerlo físicamente, tiene meses que platicamos de muchas cosas obviamente incluyendo nuestros gustos dentro del BDSM, pero no lo conocía físicamente, confío en él y sobre todo tengo el gran deseo de ser su puta y complacerlo, era lo que más temerosa me ponía que no fuera capaz de complacerlo, también pensaba lo que pasaría en nuestro encuentro, si me dejaría tocar su verga o chuparla que era lo que más anhelaba, si realmente me usaría, nunca acordamos lo que pasaría por lo que la expectativa y la emoción de conocerlo me tenía ansiosa.


Al llegar al lugar donde lo vería me entró pánico total si en la noche y en el trayecto estaba nerviosa, en ese momento hasta estaba temblando, me senté unos momentos para controlarme, es muy extraño tener tantos sentimientos mezclados, estaba emocionada, impaciente ya quería tenerlo en frente, súper caliente, seguía pensando en que no aparecería, le avisé que había llegado, me indicó dónde esperarlo, desde que llegué noté que había mucha gente incluso turistas lo cual me cohibió un poco, en la zona que lo esperé también había bastante gente, mí Amo no tardó en llegar, al momento que me saludo juro que me moje mucho más de lo que ya estaba y quería brincar de la emoción me sentí tan feliz! No sabía qué hacer o qué no hacer, sentí que seguía temblando, pero comenzamos a caminar para un tour por la zona, lo cual me ayudó bastante para relajarme y dejar de pensar las tonterías que tenía en la cabeza.


Nunca había estado por ahí, así que me encantó que mi Amo fuera mi guía de turistas; en momentos me preocupaba un poco que mí Amo me pidiera hacer algo en frente de tanta gente, quiero exhibirme, pero creo que a ese nivel todavía no. Me ayudó mucho alejarnos de dónde había tantas personas, el lugar es enorme disfrutaba la caminata y el tour pero tengo que admitir que lo único que comencé a pensar es si podría tocar la rica verga de mi Amo, poco a poco me comencé a sentí más tranquila, cansada y acalorada, no sé cuánto caminamos pero se me hizo largo el camino, hasta que encontramos un lugar con sombra para sentarnos, ahí comenzó a usarme un poco ya que me indicó que me sacara una de mis tetas y me tomó fotos, sentí luego luego que escurrió algo calientito entre mis piernas, no recuerdo claramente cómo pasó pero me estuvo tocando y metiéndome los dedos en la vagina en plena calle, anteriormente le había dicho que estaba un "poco" mojada, pero no quería admitir todavía lo "mucho" que estaba mojada, pero en ese momento lo pudo comprobar, disfrute esas breves caricias solo pensaba en lo rico que se sentía y por un breve momento no me importo que alguien pudiera vernos. Si no recuerdo mal en ese momento me atreví a tocar por encima de su ropa su pene, pero no sabía si tenía permiso de hacerlo y no lo pregunté por lo que fueron unas breves caricias y algo torpes.


Seguimos la caminata y me pidió que sacara las pinzas con cascabel, me emocioné mucho ya que solo las había utilizado un par de ocasiones, pero en casa, no es lo mismo que traerlas en la calle, aunque me encantaba caminar y que sonaran, esperaba que el sonido fuera un poco más fuerte pero aun así disfruté ir caminando por la calle e ir sonando como vaca, además de que las pusiera mi Amo. En este momento había olvidado completamente los nervios, ahora me consumía tanto el deseo de hincarme y sacar el pene de mí Amo para chupársela, aunque no me atreví a hacerlo, lo que hice en su lugar fue tocar nuevamente su verga por encima de su ropa. Seguíamos caminando, estuvo largo el camino, pero no fue para nada aburrido, me dio un par de pequeñas nalgadas, yo deseando que fueran un poco más fuertes.


Llegamos nuevamente a la avenida a la altura de un estacionamiento, buscamos lugar para sentarnos y descansar, o eso pensaba yo pero mí Amo me dio la sorpresa de que pude ver y probar su rico pene, las ganas que tenía de hacerlo y el lugar donde lo hice me cohibieron un poco por lo que me tarde un poco en meterla en mi boca, quería admirarla antes de tocarla y tenerla dentro, no podía creer que estuviera realmente pasando, quería llenarla de besos primero y lamerla un poco pero creo que mí Amo estaba un poco ansioso porque me agarró la cabeza y me la metió toda, fue muy rico, cuando comenzaba a agarrar un poco el ritmo pasaron personas por lo que tuve que dejar de hacerlo y tuvimos que aparentar que nada pasaba.


Fue una verdadera lástima que pasaran los de vigilancia porque no me dejaron disfrutar ese rico pene. El nivel de mi excitación estaba por las nubes mientras la estaba chupando me di cuenta que si me hubiera dicho que me cogería ahí mismo no me hubiera opuesto, al contrario, realmente lo quería, me sorprendió mí pensamiento el estar tan caliente y dispuesta a hacer lo que me pidiera me gustó mucho. La forma que me sentí tan desinhibida era algo que nunca había experimentado, el pensar que me tocaran a media calle o tener las tetas de fuera y estar sonando con las pinzas en los pezones me tenía escurriendo, en ese momento me dijo que me quitara las pinzas de los pezones y yo lo que necesitaba era que me tocara más, o tocarlo y volver a chuparlo lo disfruté muchísimo aunque me hubiera gustado que fuera más tiempo, tenía tantas ganas de que me llenara de semen los senos e irme así a mi casa o por lo menos estar así un rato hasta que me tuviera que ir es algo que deseo tanto y llegue a pensar que podía ocurrir ese día, he aprendido a esperar a que mi Amo indique cuando se van a hacer las cosas como ese día me recordó, es cuando él diga.


Continuamos caminando esta vez rumbo al estadio pasamos por debajo de un puente para cruzar la avenida, en esa parte me apretaba un poco mis tetas y me tomó tan desprevenida cuando me jaló y me volteo para meterme los dedos en la vagina fue tan rico como me acariciaba y me tenía jadeando y gimiendo, tiendo a ser escandalosa pero en ese momento no me importó tanto si estaba siendo ruidosa, y fue incluso más sorprendente que mí Amo me dio permiso de correrme, estuve a punto de hacerlo yo sentí que comenzaba a hacerlo pero vi que pasaba una persona y eso me distrajo y me sacó de todo lo que estaba sintiendo, no me soltó luego luego pero no insistió, mejor seguimos caminando.


Mi parte favorita es cuando llegamos al estadio, estuvimos sentados un rato, medio descansamos y luego comenzó a apretarme los pezones me hubiera gustado que fuera mucho más fuerte, me encanta el dolor en los senos, mientras yo estaba frente de él, apretando muy levemente y sobando su rica verga me tenía tan extasiada deseando tenerla en mi boca un momento más aunque fuera por poco tiempo, o imaginaba sentirla en mi culo, creo que realmente no importaba dónde solo que me usara con su verga por cualquiera de mis hoyos lo anhelaba tanto, tengo un problema ya que no sé cómo suplicarle a mí Amo por lo que solo se me ocurría decirle que sí con la cabeza o le decía "tantito por favor", sin dejar de acariciarlo por encima de la ropa, deseaba aunque sea sacarla para verla pero no me atreví no quería que me fuera a castigar sin poder tocarla, aunque todas las veces que se lo pedí de cualquiera de las dos formas él se negó pero me dejó seguir sobando su pene, entre eso y los apretones de tetas estaba tan excitada torturó varias veces mis tetas en alguna de esas ocasiones preguntó "¿De quién son estas tetas? A lo que respondí que "Suyas", hizo la pregunta como dos veces más y la respuesta fue la misma. También me preguntó "¿Y de quien más?" Le respondí: "De nadie más, solo suyas". Fue rico poder decirle con palabras y frente a frente que soy suya realmente, así me siento, soy su propiedad.


Después de la tortura de tetas me pidió que me quitara las mallas y las pantaletas que traía, si pensaba que no podía estar más excitada ese día comprobé una vez más que siempre se puede más, como me dice mí Amo, me quité las pantaletas las cuales él se llevó, no pensé que lo haría a pesar de que mencionó la posibilidad la noche anterior, mí excitación seguía en aumento, el pensar en irme sin mallas ni pantaletas con la falda que llevaba ufff todo me ponía cada vez más y más excitada. Sentía tantas cosas, había tanto deseo en mí, frustración también por no poder hacer lo que me hubiera gustado, tenía ganas que me tocara mí Amo, aunque no se podía por el tránsito de personas, lo que no impidió que pusiera su pierna y rodilla entre mis piernas para que me masturbara fue muy rico sobre todo porque no había ropa entre nosotros era piel contra piel, una cosa más a la lista de cosas que no había hecho, pensar que el sentía toda mí humedad en su pierna, aunque no lo comprobé supongo que lo dejé un poco mojado, después me pidió que me alejara para tomarme fotos y para eso solicitó que me alzara la falda, siempre me pide algo inesperado y es lo que más me fascina, nunca sé que esperar con mí Amo, no dudé mucho en hacerlo, y tomó las fotos.


Poco después de eso me colocó con las nalgas hacia él y me masturbó un poco más, lo estaba disfrutando tanto que dejó de importarme la gente, fue cuando me dijo algo así como "lo puta que estaba siendo y no me importaba". Ese comentario me hizo volver a la realidad, sentí vergüenza por un breve momento, lo que me hizo entender tres cosas: soy su puta, me gusta exhibirme y mí Amo decide cómo y cuándo, en el momento que comprendí eso fue un alivio por así decirlo, fue realmente liberador para mí, supongo que mí Amo diría que acepté esa parte de mí. Aún al día de hoy el recordar todo esto me pone súper caliente y necesitada como aquel día.


Caminamos de regreso me sentía feliz, libre, obviamente mega cachonda íbamos pasando de regreso por debajo del puente cuando mí Amo me apretó y sacudió tan rico mis tetas me sentía al borde del orgasmo, pero sé que no puedo tenerlo sin que me dé permiso, por un momento le pedía que parara porque no quería desobedecer, no imaginé el poder detener tanto tiempo el orgasmo es algo nuevo para mí, es fue muy diferente porque cuando yo tengo permiso de tocarme pues me detengo antes de, pero en esta ocasión mí Amo no paraba, creo que este momento sí le suplicaba para que dejara de apretar así mis tetas pero no lo dejaba de hacer, sentía que lo hacía un poquito más fuerte, experimente otra sensación nueva el estar tan cerca del orgasmo lo sentía en todo el cuerpo, no tengo idea cómo logré hacerlo, solo pensaba en que no quería desobedecerle, me apretaba y jalaba, medio me soltaba, sentía que se iba tranquilizando y lo volvía a hacer, fue algo muy intenso, no recuerdo cuántas veces lo hizo, yo brincaba, gemía y le rogaba que parara, me sorprendió cuando preguntó si quería permiso para correrme, lo considere, pero también sé que él decide cuándo y dónde, por lo que le dije que no gritando, no recuerdo exactamente sus palabras pero tengo la impresión de que le gustó mí respuesta poco después dejó de torturar mis tetas y seguimos caminando.


A esas alturas sentía mis piernas temblando, entre la caminata y todo lo que hicimos estaba realmente agotada, si hubiera podido me dormía, buscamos un lugar para tomar agua y comer un poco, platicamos un poco de lo que hicimos, después de hidratarnos un poco y descansar, me quedé pensando que no podía regresarme a casa sin mallas por las actividades que haría después por lo que estuvimos buscando un lugar público donde pudiera ponerlas nuevamente, volvimos a iniciar la caminata creo que mí Amo ya sabía a dónde llevarme cuando llegamos al lugar me escondí de la vista de los automóviles aunque no de los transeúntes, a estas alturas me dieron ganas de reírme cuando vi que venía gente, porque no sentía vergüenza, después de todo lo que había hecho esto no era nada, tardé un poco en ponerlas, sentía mis piernas, brazos y todo mí cuerpo como gelatina.


Volvimos a la avenida y era la hora de despedirme de mí Amo, me apretó tan fuerte en mi teta izquierda, lo cual me dejó un pequeño moretón y por supuesto me volví a mojar, creo que ha sido la mejor despedida, era hora de irme escurriendo. Al subirme al transporte, estaba totalmente agotada mi mente, la sentía en blanco y mi cuerpo no me respondía, en lo que me trasladé para hacer otros pendientes me quedé dormida así mismo cuando iba camino a casa se me cerraban los ojos, era tan excitante ir y hacer las cosas cotidianas después de lo que había hecho y sobre todo escurriendo y sin calzones, hice muchas cosas que no creí que fuera capaz de hacer me siento feliz de mi sesión al aire libre y me quedo con la curiosidad de hacer más cosas en un futuro.


Soy realmente feliz de ser su puta Amo





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Arturo987
Arturo987

Hombre dominante de 33 años al sur de la ciudad de México