Aunque el título es chistoso, remarca el estar toda una tarde jugando con mi culto. Un poco frustrada porque en Logroño parecen especiales para los encuen, esta tarde decidí ponerme guapa porque me lo merecía, así que, después de una relajante ducha, y proceso de depilación, saque un conjunto de rejilla, me maquille y me tumbe en el colchón a ver vídeos porno con la tablet.
Tras ver varios empecé acariciarme los pezones, y bajando hasta la entrepierna. Pero mi culito pedía guerra así que cogimel lubricante y empecé a jugar con un dedo, 2, el calor que sentía hizo que no parara hasta que pude introducir mi propia mano mientras mi cabeza solo pedía más.
Introduje mi fiel vibrador, que ante la holgura ganada hacía que empezara a soltar pequeños gemidos que se giban incrementando en frecuencia.
Eche mano del segundo que tengo, y me metí los dos a la vez, mientras los montaba la cabeza se me hiba y con esa doble penetracion artificial ya me había abandonado totalmente al placer.
Pero mi hoyito no estaba satisfecho, y quería ser taladrado por algo más grueso y fuerte, y entonces, comí un preservativo, se lo puse al bote de ambientados y empecé a sentarme encima, para acabar subiendo y bajando sin parar.
Tras una sesión de cabalgarlo sin parar de gemir y acariciarme los pezones.... incremente la velocidad ante el orgasmo anal que se acercaba y con mi polla apuntando a mi cara, me corri sobre ella y bebí lo que acertó en ella.
Que gran tarde de onanismo, excepto por una cosa. Que sigo con ganas de que unos buenos miembros se aprovechen de mí y descarguen toda su leche dentro o sobre mi. Mmmm.
